¿Por qué los chilenos gastamos tanto en bencina?

En Chile, la bencina es un tema. Un gran tema. Constantemente las noticias nos hablan de alzas y bajas circunstanciales que no solucionan el problema de fondo: La bencina en nuestro país es cara.

De hecho, Chile es el segundo país con el combustible más caro de Sudamérica, sólo detrás de Uruguay, y el sexto donde más caro cuesta la bencina en todo el mundo. La pregunta es: ¿Por qué es tan cara?

En Compara nos hicimos esta pregunta y decidimos investigar para responder por qué en Chile cuesta tantas lucas hacer andar el auto, cuál es el plan de las autoridades para solucionarlo… y qué tan efectivo podría ser ese plan.

¿Qué variables afectan el precio de las bencinas?

Por supuesto, para responder al por qué del gasto en bencina, no se puede señalar un solo motivo. Existen diversas razones que condicionan el precio del combustible en Chile y que en los últimos años han ido al alza, provocando la subida de precios, pero los más significativos son tres:

El valor del dólar

El tipo de cambio afecta de manera fundamental los precios de los combustibles en Chile. Hay que tomar en cuenta que el 95% del petróleo que usamos en el país es importado, por lo tanto, el precio al alza del dólar determinará las subidas de combustible.

El año pasado, en estas fechas, el dólar en Chile alcanzaba los $500 pesos, hoy bordea los $600, lo que explica las alzas continuas que vivimos en la bencina hasta agosto del 2014.

Demanda internacional de petroleo:

Como ya mencionamos, casi la totalidad del petróleo que usamos en Chile es importado. Eso implica que su valor depende también del precio fijado internacionalmente para cada barril de crudo.

Pero eso no es todo, si al precio internacional del petróleo le sumamos los gastos de traslado, mantención y transporte del combustible, más el importe que las empresas distribuidoras le suman para su ganancia, obtenemos un valor mucho más elevado del real por nuestra bencina.

A esto hay que sumarle que, como dependemos del precio internacional del petróleo, también estamos sujetos a los cambios en la demanda. Esto se convierte en un problema en los meses de enero, febrero y marzo, que coinciden con el invierno del hemisferio norte. En esa época, países como EEUU o las grandes potencias europeas incrementan su demanda de combustible, afectando el precio de los países más pequeños, como Chile.

Impuestos

Uno de los factores que más dinero suma al precio de los combustibles son los múltiples impuestos que aplica el Estado a los carburantes.

En Chile, los impuestos representan el 40% del valor por litro. Esta cifra incluye el IVA, los costos de transporte y refinamiento, lo que da como resultado una base de $340 pesos fijos que se añaden por cada litro de combustible.

Cabe destacar que el impuesto a los combustibles es uno de los más importantes para las arcas fiscales: representa el 6% de las recaudaciones totales de impuestos del estado.

Mecanismos de control de precios:

Desde la creación del Fondo de Estabilización del Petróleo, FEPCO, en 1991, Chile adoptó diversos sistemas para estabilizar el precio de sus combustibles, ya sea estableciendo un fondo de subsidios para la bencina, o bien como regulador del impuesto específico establecido por el estado.

Desde agosto de 2014, el sistema que regula los precios es el Mecanismo Estabilizador de Precios de los Combustibles. Este nuevo marco regulador reemplazó al anterior, SIPCO, que sólo tenía facultades para reducir los impuestos asociados al litro de bencina, pero no de subsidiar el costo del barril.

Como nuevo mecanismo, MEPCO ofrece una mejora sustancial a la montaña rusa de precios de la bencina en Chile: evitar que el costo por litro se dispare de un día para otro. Pero ¿Cómo lo hace?

MEPCO: un freno a la montaña rusa de precios

La misión de MEPCO es impedir las alzas exageradas y repentinas en el precio de las bencinas. Hasta su implementación en agosto de este año, no era raro que los combustibles subieran hasta un 30% de una semana a otra.

Para revertir esta situación, se hicieron dos cambios:

1.- La bencina se cuenta en pesos: la primera reforma consiste en medir los precios de los combustibles en pesos chilenos, y no en dólares, como se hacía con el SIPCO. Esto permite un mayor control de los precios en el mercado nacional, entendiendo que la gente paga su bencina en las estaciones con moneda local. Además, esta medida busca proteger a los consumidores de cualquier variación en el precio del dólar que pudiese afectar sus bolsillos.

2.- Un rango más angosto: hasta antes de la implementación del MEPCO, los diversos sistemas de regulación permitían que los precios de las bencinas variaran en un 10% al alza o a la baja cada semana. Esto provocaba alzas drásticas y una inestabilidad general en los precios del carburante.

Con el nuevo sistema, el ancho de banda para la variación de precios se redujo a la mitad. Es decir, que el precio de la bencina no puede subir ni bajar más allá de un 5% a la semana.

Además, se estableció un tope en pesos para las alzas y las bajas. Con el MEPCO, las bencinas no podrán subir ni bajar más de $20 pesos al mes.

Un dato a considerar es el siguiente: Todos los valores y porcentajes del MEPCO, así como los de todos los sistemas de regulación anteriores se regían por el precio de la gasolina de 93 octanos, la más usada en el país con un 53% del parque automotriz.

Esto generó las primeras críticas al nuevo marco regulador. Diversos economistas y expertos sugirieron incluir en la medición a los combustibles de 95 y 97 octanos. De lo contrario, se produciría una “distorsión en el mercado de los combustibles”.

A favor y en contra del MEPCO

Desde la presentación del MEPCO como nuevo sistema de estabilización de precios, han surgido críticas al sistema, apelando a que creará una confusión en los precios del mercado y que no soluciona de raíz el problema de combustibles en Chile.

Pero la principal desventaja del MEPCO según los expertos es que impide al país aprovechar los movimientos a la baja del precio internacional.

El primero ejemplo de esto se vio en las primeras semanas de octubre. La gasolina de 93 octanos bajó $30 pesos en el mercado mundial. Como el MEPCO solo permite una variación de $5 pesos semanales, Chile se perdió lo que podría haber sido un ahorro importante en combustibles.

Sobre esto, el economista Jorge Hermann explica “El MEPCO tiene un sistema muy lento de traspasar al mercado nacional lo que está pasando a la realidad. Si el petróleo está a la baja en el mundo un mes, nosotros lo notaremos de manera demasiado gradual, y con semanas de diferencia”, advierte.

El también economista, Rafael Garay, complementa con su visión crítica al nuevo sistema. “El MEPCO es bochornoso. El petróleo ha bajado en promedio un 29% en los últimos meses, y los chilenos solo vimos bajas del 7%. Como mecanismo no funciona”, sentencio a Canal 13.

En tanto, el Ministro de Haciendo, Alberto Arenas, defiende la medida, asegurando que el MEPCO servirá como “escudo” ante las alzas repentinas del crudo en el mundo. “Lo que queremos es ordenar la casa. Ya no habrá bajas repentinas, pero tampoco alzas. El MEPCO le dará prudencia al mercado de combustibles”, comenta.

¿Cómo Ahorrar en Bencina para mi auto?

Ya conoces por qué en Chile pagamos precios altos por el combustible y cómo el MEPCO ayudará (o quizás no) a solucionar estas alzas en la bencina. Pero existen otras formas de ahorrar en cuánto gastas para hacer andar tu auto.

Por ejemplo, informarte y comprar un Auto eficiente, que aproveche al máximo hasta la última gota de combustible.

O tal vez conocer tips sencillos y fáciles de hacer a diario para no gastar de más en la bencina de tu auto. 

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