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Frenos del auto: ¿cada cuánto se debe mantener?

Escrito por Clara Escobar

Sin duda, los frenos de tu auto son una parte importante de tu seguridad al conducir, pues tener sus componentes en buen estado hará que puedas frenar siempre a tiempo y así evites accidentes.

Los discos de freno y las pastillas requieren revisiones periódicas y recambios cuando están gastados, sin embargo, deberás estar bien atento para saber cuándo es necesario hacerlo.

¿Cada cuánto se cambian?

Si tienes un auto 0km, deberás empezar a controlar los componentes del sistema de frenos cuando llegas a los 25.000 km, aunque esta no es una regla fija. Las pastillas y discos de los vehículos que circulan más por la ruta durarán más que los que van por la cuidad, porque en el último caso, se frena mucho más que en el primero. Pero como no hay una norma fija a seguir, deberás aprender cuáles son las señales de que es tiempo de recambio.

Señales de que tienes que cambiar las pastillas

Ciertos fabricantes instalaron en sus modelos sistemas que avisan al conductor que ya es tiempo de un recambio de pastillas. Algunas de ellas traen un mecanismo que cuando se desgasta, le avisa al usuario con una luz en el tablero, mientras que otras, a medida que se gastan, producen un ruido particular que alerta al conductor para que pronto las cambie.

También puedes darte cuenta de que ya se están gastando con sólo mirarlas, cuando ves que el material que toca los discos se está acabando. De todas formas, si no estás seguro de cómo comprobarlo, haz revisar el sistema de frenos con tu mecánico y dile que te enseñe a tenerlo controlado.

¿Y los discos cuando se cambian?

Dicen los expertos que si recambias las pastillas en tiempo y forma, los discos no se arruinarán y no necesitarás cambiarlos por mucho tiempo. Igualmente, cada vez que renueves las pastillas, debes revisar los discos para ver si están en perfecto estado. Si hay signos de desgaste, habrá que sustituirlos.

Para conducir todos los días con total seguridad necesitas un vehículo en perfecto estado, sumado a un seguro de autos que te proteja frente a imprevistos. De esta manera no tendrás de qué preocuparte y tu experiencia de manejo será siempre positiva.